Desecha la idea de un futuro, abandona toda esperanza, acepta
que estas solo, llora, llora mucho. Contrólate,
mentalízate, algunos lo llaman meditación, has todo lo que puedas por liberarte
“del sistema”, acepta que no lo lograste ni lo lograras, pero aléjate lo más
que puedas. Podríamos pensar que las necesidades básicas son escalón para la
felicidad pero es paradigmático darnos cuenta que las pasamos por alto cuando
llegamos al éxtasis, a ser felices. Vuélvete loco, no me hagas caso, has lo que
desees, regresa, preocúpate por los demás, manda al demonio a cualquiera que te
produzca sensaciones “non gratas” a ti y sigue, no veas atrás. Voltea la
mirada, valora tus pasos, analiza tus errores pero no te arrepientas, arregla
tanto puedas arreglar y quieras, eso es importante, no te guíes por el deber, guíate
por lo que quieres, lo que deseas. Desea, lanza una moneda al agua ten fe y olvídala.
Desea, haz el amor, ¡AMA!, ama mucho, ama sin prejuicios, ama locamente y
desenfrenadamente, entrégate sin miedos, salta, disfruta esa sensación de caer
sin poder detenerte, si tener siquiera una posibilidad de salvarte, sin saber por
qué caes, enamórate.
Pocas veces me he sentido así, por eso solo puedo dar en esbozo
de este estado humano de excitación y de tranquilidad a la vez, estoy
adolorido, cansado, enfermo, sin grandes posesiones materiales, me duele el
cuello al escribir esto y aun así soy feliz, que complejos son los
sentimientos.
Odio mi risa y mi cuerpo que en veces pienso que iba a ser
femenino, odio trabajar, odio la comida monótona, odio que mi cara sea grasosa
y mi cabello seco y quebradizo, odio la gente que creé que el mundo progresa “para
bien”. Me entristece ver a mi madre y la situación por la que pasa, mi falta de
apoyo para ella y el ver que me lo ha dado todo, un amor inmenso sin ser
expresado literalmente. Creo que la felicidad es como el color café, que juntas
azul, verde, odio, morado, tristeza, amarillo, enojo y sale café, color café,
al menos combinando pinturas, la felicidad es café.
Odio, rio, lloro, amo, y soy feliz.
